La oposición denuncia una «violación de derechos» en la cárcel de Villabona
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Exigen la dimisión del jefe de prisiones, al que culpan de la muerte de 4 reos. Ángel Yuste pide cautela y carga contra los gestores de la UTE
El pulso que vive en los últimos años la cárcel de Villabona se reprodujo ayer, con acusaciones de grueso calibre, entre los diputados y senadores que interpelaron a Ángel Yuste, el secretario general de Instituciones Penitenciarias. Durante hora y media los grupos de la oposición exigieron la dimisión del responsable de prisiones, al que responsabilizaron de la «violación de derechos humanos» que a su juicio sufre el centro. A Yuste se le acusó del «desmantelamiento» de las Unidades Terapéuticas y Educacionales (UTE), del aumento en la conflictividad en el centro y de los tres fallecidos de los últimos cinco meses. El secretario general lamentó las «trágicas muertes», aclaró que aún desconoce las causas del último deceso, este mismo lunes, y negó que en la celda del reo se hubiera localizado droga.
La comparecencia debía centrarse sobre la situación de las UTE pero el último suceso cambió el guion. El diputado socialista Antonio Trevín aseguró que junto al último cadáver «apareció un trozo de papel de plata y un mechero», lo que unió a los dos muertos por sobredosis del pasado noviembre. En la legislatura socialista las UTE «eran la base para tener un centro con la menor conflictividad del sistema penitenciario» y hoy es uno de los «que tienen mayores problemas», indicó. «Usted viene aquí con una gestión desastrosa y catastrófica y es quien debía velar por la integridad de las personas que están internas», reprochó. El último fallecido es un langreano con historial por toxicomanía. «Con los antecedentes que tenía, con el proceso que viene desarrollando desde pricipios de esta legislatura, ha propiciado el desastre en que se ha convertido», criticó el diputado del PSOE.
Yuste contraatacó recordando que en el año 2011 Trevín era delegado del Gobierno y en Villabona hubo 14 muertes, tres de ellas en las UTE; aquel año se produjo además «el único asesinato que ha habido» en la cárcel asturiana. «¿Pidió entonces la dimisión al responsable de Instituciones Penitenciarias?», inquirió el compareciente. «En este momento puede decirle que en 2011 hubo más muertos en Villabona y en la UTE que en toda la legislatura que llevo al frente de Instituciones Penitenciarias», comparó Yuste.
El secretario general recordó que el modelo UTE se inició en su anterior etapa al frente del departamento, y que en la actual lo ha trasladado a diez cárceles más. «Es una extraña manera de desmantelarlo», ironizó. Yuste señaló que en esta legislatura lo que se encontró es que Villabona era «la única cárcel de España sin módulos de respeto», un formato de reinserción intermedio y menos exigente que la UTE. Bajo su tutela tres módulos del penal asturiano están aplicando esta fórmula alternativa.
El alto cargo del Ministerio del Interior aseguró que «el problema con la UTE» nació cuando el director de Villabona «quiso corregir situaciones de irregularidad administrativa que se venían dando con algunos funcionarios» de los módulos terapéuticos. «Alguno de los funcionarios», disconforme con los cambios, trasladó su protesta a «los medios de comunicación, los representantes políticos y la Defensora del Pueblo».
El organismo de control visitó Villabona y emitió un informe reclamando un giro en la gestión. Interior lo aceptó «parcialmente», admitiendo la necesidad de regular mejor el funcionamiento de la UTE «para dar seguridad jurídica a los funcionarios», relató Yuste.
El secretario general acusó al «equipo multidisciplinar» de la UTE de «expropiar los derechos de los presos» y formar «una organización paralela que violenta la legalidad». Según dijo, exigían a los reos firmar un contrato según el cual «renunciaban a la tutela judicial; si denunciaban al juez eran expulsados». Además habrían presentado al Defensor del Pueblo un protocolo de funcionamiento «que ni se puede aplicar ni se aplicó nunca» y que deja en manos del equipo multidisciplinar funciones como la derivación de presos, la selección de funcionarios y demás, atribuciones que corresponden a la dirección del centro. «No puede haber un coto privado dentro de Villabona», alegó antes de lamentar las «ocurrencias personalistas que aspiraban a derogar la vigencia de la legalidad».
Isidro Martínez Oblanca, de Foro, estimó «desolador» la realidad de la prisión, donde se «incumple la Constitución». Gaspar Llamazares, de IU, censuró que en lugar de potenciar la UTE se la «trate de eliminar como un quiste».
Noticia del diario El Comercio de dia 29/04/2015